Hay una pared ahi enfrente, que avanza en paralelo a mis pasos. Siempre ahi presente, con una altura no mayor a mi, me mira desde hace mucho. Y avanza y avanza, y sigue avanzando por mi carretera.
Quiere que intente saltarla, porque sabe que fallare.
En su base, brilla el reflejo del sol puedo ver. Me pongo enfrente del mismo, y me veo quebrado en el espejo que entero yace todavia.
Me asombro, me pregunto, me golpeo, me apabullo, me lastimo...
El muro siempre ahi adelante, esperando ser saltado. Y yo, lastimandome...
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