domingo, 12 de junio de 2011

El futuro de la ansiedad

Como un tambor endemoniado, late sin cesar en estos días.
Leños de ideas cayendo, alimentan el fuego interno, ese que quema, y quema, y quema.
El calor agobia, y no deja respirar. Las lágrimas del cuerpo son llantos del pasado, el que con la deshonra forjan la bobería injustificada.
Se ve el futuro.
Distante...
Próximo...
Intimidante.

La tormenta está al acecho.

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